31 marzo 2006

Famosos sin fama

Muchas veces se atribuye el éxito de las guerras a los grandes generales o a los políticos de turno cuando el mérito es, en realidad, de otros cuyos nombres no quedan tan resaltados en las doradas letras de la historia. ¿Que no me creéis?. Dejadme que os dé un ejemplo en el que os intente hacer cambiar de opinión.En 1941 en plena Segunda Guerra Mundial quiso enrolarse en el ejército un famoso mago inglés llamado Jasper Maskelyne (1902-1973). La guerra había dejado los teatros sin espectadores y tenía que buscarse la vida. Fue rechazado por ser muy viejo ya que tenía 37 años y no había recibido instrucción militar, pero un año después convenció a unos oficiales británicos de que podía usar sus habilidades para ayudar al ejército en el frente africano. ¿Y qué podía hacer un mago en el ejército aparte de entretener a los hombres? Pues magia. De entrada, maravilló a los oficiales con una simulación perfecta: la aparición de un acorazado alemán subiendo por el Támesis.Llevaba la magia (y la inteligencia) en las venas. Su abuelo John Nevil Maskelyne (1839-1917) había introducido en 1873 la ilusión de la levitación, aunque había hecho más cosas. La marca de máquinas de escribir británica Maskelyne fue la que a finales del siglo XIX innovó presentando los primeros modelos con espaciado proporcional al tamaño del carácter, característica que solo fue reintroducida por IBM en 1941. Su padre había heredado la sabiduría del abuelo y se la había dado a Jasper. En Gran Bretaña el apellido Maskelyne era sinónimo de magia.El desierto del norte de África era uno de los escenarios más importantes de la Segunda Guerra Mundial. Quien tuviera el control de esa zona podría usarla de trampolín para invadir Sicilia y luego Italia. Los alemanes querían bombardear el puerto de Alejandría pues era de gran valor estratégico por el petróleo y por los suministros para los ingleses. Allí fue enviado Maskelyne al que se le permitió formar una unidad de camuflaje experimental. Reclutó dibujantes, químicos, vidrieros, ceramistas, etc. Se había formado la "Banda Mágica".Le preguntaron qué podría hacer para proteger el puerto de Alejandría, ¿hacerlo desaparecer?. No lo hizo exactamente así. Observó los alrededores y descubrió a unos pocos kilómetros que la Bahía Maryut tenía un contorno similar a dicho puerto. Como los bombarderos alemanes atacaban por la noche hizo una réplica de las luces de Alejandría en ese desierto lugar y puso edificios de cartón pintado. Al llegar la noche hizo que se apagaran las luces de Alejandría y se encendieran las de Bahía Maryut. Los aviones, pensando que aquello era su objetivo, fueron allí a descargar sus bombas creyendo que habían tenido un éxito en su misión. Fue tan hábil que puso incluso pequeños explosivos para simular aciertos alemanes. Bombardearon dicha bahía dos noches consecutivas.Con un éxito como este le preguntaron si podía proteger el Canal de Suez pues era otro punto clave y uno de los objetivos de Erwin Rommel (el único miembro del tercer reich que tiene un museo de su vida y obra) ya que permitía el paso de petróleo para los tanques y barcos ingleses. Maskelyne puso luces estroboscópicas de 14 km de alcance y un sistema de espejos rotativos. Ello provocó que los aviones que pasaban sobre el canal no vieran absolutamente nada y no pudieran bombardearlo.Su mayor truco fue, sin embargo, en la batalla por Egipto. Rommel había conquistado Tobruk rechazando al ejército británico hasta el Alamein, a 100 kilómetros al oeste de Alejandría. Montgomery decidió atacar por el norte, por donde pasaban las vías de suministros y Maskelyne hizo ver a los alemanes un ejército atacando por el sur. Para ello se instalaron maquetas de todo tipo: tanques, cañones, aviones, hombres, cascos de acero incluso un falso oleoducto hecho con latas de combustible.El engaño funcionó. Los alemanes concentraron la mayor parte de sus fuerzas en el sur para frenar a ese "falso" ejército mientras los británicos iniciaban el verdadero ataque por el norte. Para cuando Rommel quiso mandar sus tropas hacia esa zona ya era tarde pues los británicos habían atravesado sus líneas y estas empezaban a retroceder hacia Libia.Con hazañas como estas, uno se plantea si los magos son en realidad ingenieros o son los ingenieros los que en realidad hacen magia. Yo creo que era ambas cosas. Cada uno puede tener su punto de vista pero sin ningún género de dudas la astucia de este hombre pudo más que las decenas de libros de estrategia estudiados por el oficial alemán. Probablemente ni a él mismo se le pasó por la cabeza que sería capaz de vencer al mítico "zorro del desierto" sin disparar una sola bala.En 1946 regresó a Inglaterra para continuar haciendo magia y, orgulloso de su labor, obtuvo permiso para actuar luciendo el uniforme del ejército británico. Hizo una gira con mucho éxito pero no pudo con otro formidable adversario: la televisión.Se retiró a Kenia hasta su muerte. Sus secretos mágicos de guerra serán revelados por el gobierno inglés a partir de 2046 (!).Fuentes:"El hombre que calumnió a los monos", Miguel Angel Sabadellhttp://www.maskelynemagic.com/http://www.lacoctelera.com/guso/post/2006/01/27/jasper-maskelyne-mago-la-guerrahttp://es.wikipedia.org/wiki/Jasper_Maskelynehttp://es.wikipedia.org/wiki/John_Nevil_Maskelynehttp://www.chilepd.cl/drupal/un_mago_en_la_guerra?PHPSESSID=c6b1b8aec98cfc1ce8423a94249da8efhttp://productointeriorbruto

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